Bocados y cervezas: explorando los territorios gastronómicos inexplorados de Bélgica

Bélgica, un pequeño país de Europa occidental, suele pasar desapercibida cuando se trata de aventuras gastronómicas. Sin embargo, Bélgica es una joya escondida tanto para los amantes de la comida como para los entusiastas de la cerveza. Desde deliciosos chocolates hasta deliciosos gofres, Bélgica deleita a sus visitantes con una amplia gama de tesoros culinarios. En este artículo, lo llevaremos en un viaje virtual a través de los territorios gastronómicos inexplorados de Bélgica, explorando los bocados y cervezas únicos que hacen de este país un paraíso para los amantes de la comida.

La delicia belga del chocolate

Ningún recorrido culinario por Bélgica estaría completo sin disfrutar de su mundialmente famoso chocolate. El chocolate belga es conocido por su calidad superior y su artesanía. El país cuenta con cientos de chocolaterías y chocolaterías artesanales, cada una de las cuales ofrece su toque único a este delicioso manjar. Algunas de las chocolaterías de visita obligada en Bélgica incluyen:

  • Pedro Marcolini: Conocido por su elegante embalaje y su excepcional calidad, Pierre Marcolini es un nombre líder en la industria del chocolate belga. Sus chocolates están elaborados a mano con ingredientes de alta calidad y combinaciones de sabores innovadoras.
  • Neuhaus: Con una historia que se remonta a 1857, Neuhaus es uno de los chocolateros más antiguos y prestigiosos de Bélgica. Se les atribuye la invención del praliné, un chocolate relleno con un centro cremoso.
  • Leónidas: Fundada en 1913, Leonidas es una querida marca de chocolate belga con una amplia gama de bombones, trufas y otras creaciones de chocolate. Son conocidos por sus precios asequibles y su excelente calidad constante.

Si es un verdadero conocedor del chocolate, considere visitar el Museo del Chocolate en Bruselas o asistir a un taller de elaboración de chocolate para aprender el arte de elaborar usted mismo estas delicias.

Las maravillas de la cerveza belga

A menudo se hace referencia a Bélgica como el “paraíso de la cerveza” del mundo, y con razón. El país alberga más de 1.500 tipos diferentes de cerveza, cada una con su propio sabor y carácter. La cerveza belga se elabora con pasión y tradición, utilizando métodos ancestrales que se han transmitido de generación en generación.

Hay varios tipos de cerveza belga que deberían estar en la lista de todo amante de la cerveza que debe probar:

  1. Cervezas Trapenses: Producidas por monjes trapenses dentro de los muros de sus monasterios, las cervezas trapenses están consideradas unas de las mejores del mundo. Son conocidos por sus ricos sabores y alto contenido de alcohol. Chimay, Westvleteren y Orval son sólo algunos ejemplos de famosas cervecerías trapenses en Bélgica.
  2. Cervezas Lámbicas: Las cervezas lambic son exclusivas de Bélgica y se producen mediante un proceso de fermentación natural utilizando levadura silvestre. Gueuze y Kriek son dos estilos populares de cervezas lambic que vale la pena probar.
  3. Cervezas marrones: Bélgica produce una amplia gama de cervezas marrones, conocidas por sus sabores complejos y maltosidad. Rodenbach y Westmalle Dubbel son ejemplos clásicos de cervezas marrones belgas.
  4. Ilustración para la sección: - picaduras de bélgica

Para una experiencia cervecera verdaderamente inmersiva, considere visitar las famosas ciudades cerveceras de Bélgica, como Bruselas, Brujas y Gante, donde podrá explorar cervecerías y cervecerías históricas.

Delicias belgas más allá del chocolate y la cerveza

Si bien el chocolate y la cerveza ocupan un lugar central en la escena culinaria belga, hay muchas otras delicias que no deben pasarse por alto. Aquí hay algunas otras especialidades belgas que vale la pena explorar:

  • Moules-frites: Los belgas están muy orgullosos de sus mejillones y una de las formas más populares de disfrutarlos es con una guarnición de crujientes patatas fritas. Dirígete a un restaurante de mariscos local para saborear este clásico plato belga.
  • Especuloos: Los speculoos son galletas de masa quebrada especiadas que son un alimento básico en Bélgica. A menudo se sirven con café o té y son el dulce perfecto.
  • Waffles belgas: Conocidos por su textura ligera y esponjosa, los gofres belgas son algo que debes probar cuando visites Bélgica. Ya sea que los prefieras solos o cubiertos con deliciosas fresas y crema batida, seguramente deleitarán tu paladar.
  • Stoemp: El stoemp es un plato reconfortante elaborado con puré de patatas y mezclado con verduras como zanahoria, repollo o coles de Bruselas. A menudo se sirve junto con salchichas o albóndigas.
  • Carbonada Flamanda: Este abundante estofado de ternera es un clásico belga. Se elabora con trozos de carne de res cocidos en cerveza, condimentados con hierbas aromáticas y servidos con pan crujiente.

Cuando explore Bélgica, asegúrese de aventurarse más allá de las zonas turísticas y descubrir restaurantes y mercados de alimentos locales, donde podrá degustar estas auténticas delicias belgas.

Conclusión

Bélgica es un país que realmente deleita el paladar. Desde ricos y aterciopelados chocolates hasta una amplia selección de sabrosas cervezas, esta pequeña nación ofrece una aventura gastronómica difícil de igualar. Las tradiciones culinarias de Bélgica están profundamente arraigadas en su historia y patrimonio cultural, lo que hace que cada bocado y sorbo sea una experiencia verdaderamente auténtica.

Ya sea que sea un amante de la comida, un entusiasta de la cerveza o simplemente alguien que busca nuevos sabores, una exploración de los territorios gastronómicos inexplorados de Bélgica es una necesidad absoluta. Aventúrate más allá de lo familiar y descubre la magia culinaria que te espera en este país vibrante y sabroso.

¿Entonces, Qué esperas? ¡Reserve hoy su recorrido culinario por Bélgica y deje que sus papilas gustativas se embarquen en un viaje que nunca olvidarán!